MOLINO DE VIENTO NARCOPROSTITUCIÓN EN LAS PALMAS DE GRAN CANARIA

NARCOPROSTITUCIÓN EN MOLINO DE VIENTO Y
CALLES ADYACENTES EN LAS PALMAS DE GRAN CANARIA

Las Palmas de Gran Canaria estuvo sometida por la submetrópoli de la isla del oeste durante cien años tras el ataque de la Flota Naval del vicealmirante holandés Pieter Van der Does, responsable de la devastación de la ciudad más importante de Canarias, por la estúpida decisión del cornudo Carlos IV de nombrarla "capital" de la "provincia única" de Canarias. Las Palmas de Gran Canaria se fundó en 1478 y la villa-embarcadero de Santa Cruz de Tenerife en 1859, cuarenta años despues de su nombramiento como "capital" de Canarias. Hasta los bachilleres Benito Pérez Galdós, Fernando León y Castillo y Juan Negrín López, eminencias grancanarias formadas en los colegios de Las Palmas de Gran Canaria, estaban obligadas a examinarse de réválida en el Instituto General y Técnico de Canarias (con sede en San Cristóbal de La Laguna y dependiente del distrito universitario de Sevilla). La primera ciudad española tanto en Canarias como en América relegada durante un siglo por culpa de la devastación provocada en la ciudad por las tropas de Flandes en guerra contra España por la independencia y por la insólita decisión del hijo del "guaperas" Carlos III (es más "feo que pegarle a un padre" dicen que dijo María Luisa de Parma, nieta de Luix XV y esposa de Carlos IV, cuando conoció a su futuro suegro) de otorgarle el título de capital de Canarias. Pero llegó 1927 y la isla del oeste volvió a ocupar su verdadero puesto en el archipiélago, no sin resistencia y amenazas. ¡Tremendos cagones!

Sin embargo no todos los males de Gran Canaria se deben achacar a la isla del oeste; por ejemplo la narcoprostitución en Las Palmas de Gran Canaria. Entre la Comandancia Militar de Marina y la subsede del gobierno regional cuya vicepresidencia ostenta uno de los cabecillas de Nueva Canalla (partido político borrado del Registro de Partidos Políticos por no presentar el balance de las cuentas desde hace tiempo aun cuando ha seguido cobrando la subvención anual del Parlamento de Canarias) se alza Nueva Colombia (antaño conocida como Barrio Lugo). La "zona roja" (prostitución junto a viviendas y colegios; narcomenudeo; reyertas y escándalos a todas horas; degradación urbanística por el abandono de numerosas casas tapiadas para impedir la okupación ante la imposibilidad de venderlas o alquilarlas a gente honrada y trabajadora) está comprendida por Molino de Viento y calles adyacentes como Aguadulce, Pamochamoso, Carvajal, Mátias Padrón, Suárez Naranjo, Ángel Guimerá, Castrillo. Las protestas de los vecinos desde hace años han sido desoidas sistemáticamente por las "autoridades competentes" que naturalmente viven en otras zonas de la ciudad, esas sí, bajo el imperio de la ley. Ni putas ni drogadictos ni maleantes a menos de media legua de sus mansiones.

¿Cual podría ser la solución? Quizá los vecinos debieran declararse insumisos fiscales mientras las "autoridades competentes" (alcaldía, policía y fiscalía de menores puesto que son cientos de niños los que conviven junto a los narcoprostíbulos) no resuelvan la grave situacion de convivencia y respeto a los derechos de los menores de edad. La declaración de insumisión fiscal debe presentarse en la Administración Tributaria como aviso o medida de protesta y posteriormente, la copia sellada, en el Juzgado de Guardia para que la autoridad judicial competente resuelva lo que tenga que resolver y dar comienzo a un contencioso-administrativo susceptible de llegar incluso hasta el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, donde España ha sido condenada repetidamente por delitos varios. Alguien tiene que limpiar el vertedero de Nueva Colombia, y los vecinos son quienes tienen que dar el primer paso.