CRÓNICAS DE RAFAEL SÁNCHEZ ARMAS
SOCIEDAD EN COMANDITA
Sucedió hace años en un país lejano. El detective privado extranjero contratado por las autoridades locales como agente encubierto permitió la operación contra el objetivo. Lo que ocurrió posteriormente entre los narcotraficantes y los policías dejó hablando solo al detective privado. ¿Hubiera podido denunciar los hechos sin poner en peligro su vida? El reciente libro de la periodista mexicana Anabel Hernández García me ha traído a la memoria aquel suceso, y mi conclusión desde hace muchos años de que el narcotráfico es un negocio permitido bajo la apariencia de su represión. No hay forma de acabar con el mismo porque en la cúspide de la mafia no están los populares narcotraficantes, sino el poder económico, político y judicial con la complicidad, por desinformación, del periodismo manoseado por la mafia.
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AGENCIA BK DETECTIVES ASOCIADOS